Cada día, salen nuevos datos sobre el estado en el que se encuentra nuestro México y sobre los protagonistas y la forma en que actúan la iglesia, el Ejercito, los distintos poderes y los medios de comunicación, aquellos sucesos callados y que hoy no todo se ha hecho escuchar tan fuerte como debiera por el temor ahora infundido, temor a la institución mas manipuladora del país, el Ejercito, la Iglesia y el Gobierno..
Que pasaría si a nosotros, o algún amigo o hijo lo mataran a tiros en la calle por el simple hecho de exigir ser escuchado? Que investigación haría la policía? Que diría al respecto la comisión Nacional de los Derechos Humanos? Que cobertura le darían los medios de comunicación? Tal vez no sería lo que esperamos, y ese es precisamente el problema Señores!! El cáncer que enferma a México después sucesos que muchos han querido enterrar y olvidar.
Ante la impunidad del pasado aun quedan las preguntas del presente, ante los abusos de ayer persisten los abusos de hoy. Familias destrozadas desde ese año fatídico, los años pasan y las aclaraciones y respuestas se transforman en demandas de gente ignorada en un montón de hojas viejas y en un olvido impuesto.
En México hubo y hay muertos, hubo y hay heridos, perseguidos y desaparecidos producto de la violencia de un gobierno fanático y enajenado, en México aun siguen los rostros desfigurados, su nariz rota, sus cuerpos llenos de moretones, sus familias desesperadas, gente silenciada a golpes, amenazas, desaparecidos y muertos.
Porque las preguntas sobre la legalidad en México a muchos incomoda, a muchos asusta. A los grandes empresarios, al clero y a los políticos que sustenta y mantiene. Al ejército y a los culpables que ha protegido, a los sacerdotes y políticos con la conciencia intranquila. A los cómplices, a los que se callan, a los que reprimen, a los que son culpables a los que actúan de forma impune y abusiva en el pasado y en el presente y no quieren recordarlo. A los que no quieren escuchar y menos responder la pregunta que se ha vuelto demanda; Donde está la tranquilidad en México? Que paso con nuestros derechos y seguridad?
Todos los estúpidos defensores de la política dicen que investigar sobre el gobierno y su legalidad colocaría a México al borde del precipicio, neutralizaría al país, lo desviaría, provocaría incertidumbre, impediría reformas, debilitaría el poder, y encerraría al más alto mando. Pero, eso ya está ocurriendo, ya se está dando precisamente eso. México ya está puesto en una repisa falseada, frágil, precaria, ya se está desviando, su gente ya padece la incertidumbre, ya esta mas débil su honestidad y su pureza, ya no hay mas reformas para el ciudadano, ya el más alto mando se quedo ahí. Y lo único que hace es desviar la atención de la gente, asustarla y militarizando las calles del país, "para combatir al narcotráfico".
Muchos son los nombres impunes, pioneros de la desconfianza, jefes de la trampa, símbolos de la nación manipulada, maestros de la mentira e imágenes de la republica sangrada, cabecillas del país que revive lo más vil, cruel y nefasto del pasado, una y otra y otra vez. Estamos en un país donde siempre hay gente corrupta señalada pero jamás gente corrupta encarcelada, aquí ya todo se hizo normal, los errores, los escándalos, la corrupción, la impunidad y las fallas no son señal de catástrofe, sino de sucesos que continuaran. Desde hace tiempo el gobierno ha sido explotador organizado por grupos de unos cuantos, volviéndose depredador institucionalizado y así vive la política en México, así la padece su gente, victimas voluntarias e involuntarias algunos por no levantar la voz, víctimas de una clase político-religiosa que sigue sirviéndose a sí misma. Por eso hoy no son tiempos de olvidar y guardar archivos, siguen siendo tiempos de aclarar y castigar. No son tiempos de perdonar y olvidar, es tiempo de justicia y memoria, no es tiempo de celebrar lo mucho que México ha cambiado y de festejar su independencia o Bicentenario si aun no la hay y si no hemos cumplido 200 años de verdadera libertad, son tiempos de aceptar cuanto le falta aun para cambiar y ser libre realmente, no es tiempo de celebrar la transparencia electoral como avance, son tiempos de exigir que nuestros gobernantes tengan decencia y dignidad.
No es tiempo de aplaudir que por lo menos hay seguridad social y se combate al crimen, es tiempo de exigir respeto a nuestros derechos, que los mexicanos merecemos más que esos políticos que se enriquecen de forma inescrupulosa a costillas de los mexicanos. No es tiempo de punto y final, son tiempos de punto y seguido. Porque el objetivo de quienes participaron y sigue haciéndolo en actos de abuso, represión, corrupción y encubrimiento político y clérigo es acallarnos, detenernos, juzgarnos, castigarnos, hoy y siempre así lo harán para que el pasado no le gane al presente.
Pero seguiremos latentes aunque la carne quede hecha trizas en el intento!!
Autor: Ofiuco
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Que pasaría si a nosotros, o algún amigo o hijo lo mataran a tiros en la calle por el simple hecho de exigir ser escuchado? Que investigación haría la policía? Que diría al respecto la comisión Nacional de los Derechos Humanos? Que cobertura le darían los medios de comunicación? Tal vez no sería lo que esperamos, y ese es precisamente el problema Señores!! El cáncer que enferma a México después sucesos que muchos han querido enterrar y olvidar.
Ante la impunidad del pasado aun quedan las preguntas del presente, ante los abusos de ayer persisten los abusos de hoy. Familias destrozadas desde ese año fatídico, los años pasan y las aclaraciones y respuestas se transforman en demandas de gente ignorada en un montón de hojas viejas y en un olvido impuesto.
En México hubo y hay muertos, hubo y hay heridos, perseguidos y desaparecidos producto de la violencia de un gobierno fanático y enajenado, en México aun siguen los rostros desfigurados, su nariz rota, sus cuerpos llenos de moretones, sus familias desesperadas, gente silenciada a golpes, amenazas, desaparecidos y muertos.
Porque las preguntas sobre la legalidad en México a muchos incomoda, a muchos asusta. A los grandes empresarios, al clero y a los políticos que sustenta y mantiene. Al ejército y a los culpables que ha protegido, a los sacerdotes y políticos con la conciencia intranquila. A los cómplices, a los que se callan, a los que reprimen, a los que son culpables a los que actúan de forma impune y abusiva en el pasado y en el presente y no quieren recordarlo. A los que no quieren escuchar y menos responder la pregunta que se ha vuelto demanda; Donde está la tranquilidad en México? Que paso con nuestros derechos y seguridad?
Todos los estúpidos defensores de la política dicen que investigar sobre el gobierno y su legalidad colocaría a México al borde del precipicio, neutralizaría al país, lo desviaría, provocaría incertidumbre, impediría reformas, debilitaría el poder, y encerraría al más alto mando. Pero, eso ya está ocurriendo, ya se está dando precisamente eso. México ya está puesto en una repisa falseada, frágil, precaria, ya se está desviando, su gente ya padece la incertidumbre, ya esta mas débil su honestidad y su pureza, ya no hay mas reformas para el ciudadano, ya el más alto mando se quedo ahí. Y lo único que hace es desviar la atención de la gente, asustarla y militarizando las calles del país, "para combatir al narcotráfico".
Muchos son los nombres impunes, pioneros de la desconfianza, jefes de la trampa, símbolos de la nación manipulada, maestros de la mentira e imágenes de la republica sangrada, cabecillas del país que revive lo más vil, cruel y nefasto del pasado, una y otra y otra vez. Estamos en un país donde siempre hay gente corrupta señalada pero jamás gente corrupta encarcelada, aquí ya todo se hizo normal, los errores, los escándalos, la corrupción, la impunidad y las fallas no son señal de catástrofe, sino de sucesos que continuaran. Desde hace tiempo el gobierno ha sido explotador organizado por grupos de unos cuantos, volviéndose depredador institucionalizado y así vive la política en México, así la padece su gente, victimas voluntarias e involuntarias algunos por no levantar la voz, víctimas de una clase político-religiosa que sigue sirviéndose a sí misma. Por eso hoy no son tiempos de olvidar y guardar archivos, siguen siendo tiempos de aclarar y castigar. No son tiempos de perdonar y olvidar, es tiempo de justicia y memoria, no es tiempo de celebrar lo mucho que México ha cambiado y de festejar su independencia o Bicentenario si aun no la hay y si no hemos cumplido 200 años de verdadera libertad, son tiempos de aceptar cuanto le falta aun para cambiar y ser libre realmente, no es tiempo de celebrar la transparencia electoral como avance, son tiempos de exigir que nuestros gobernantes tengan decencia y dignidad.
No es tiempo de aplaudir que por lo menos hay seguridad social y se combate al crimen, es tiempo de exigir respeto a nuestros derechos, que los mexicanos merecemos más que esos políticos que se enriquecen de forma inescrupulosa a costillas de los mexicanos. No es tiempo de punto y final, son tiempos de punto y seguido. Porque el objetivo de quienes participaron y sigue haciéndolo en actos de abuso, represión, corrupción y encubrimiento político y clérigo es acallarnos, detenernos, juzgarnos, castigarnos, hoy y siempre así lo harán para que el pasado no le gane al presente.
Pero seguiremos latentes aunque la carne quede hecha trizas en el intento!!
Autor: Ofiuco
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